Los hipermercados se convierten en mayoristas o achican las superficies alquilando a otros rubros, los locales por mayor se reducen y crece la opción de comprar online y retirar por el local.
Frente a un 2018 con escasas expectativas de crecimiento, luego de dos años consecutivos de caída, los canales de consumo masivo están barajando las cartas de un juego que ya no seduce a los consumidores como en otras épocas. No sólo por el efecto de la inflación y la pérdida del poder adquisitivo, sino también debido a un giro actitudinal que se observa en la demanda a nivel global.
Para las grandes cadenas, el derrumbe del consumo -sumado a los altos precios de las locaciones- hace que no puedan recuperar la rentabilidad por metro cuadrado.
Carrefour reconvierte 16 hipermercados en mayoristas
En este contexto de crisis general del supermercadismo, la semana pasada, por ejemplo, la casa matriz de Carrefour, en Francia, anunció un plan de ajuste que en la Argentina incluye la reconversión de 16 hipermercados en el formato mayorista para reducir sus costos en el surtido de las góndolas y captar al cliente que se está volcando a las compras por cantidad para conseguir mejores precios.
El mayorista Diarco está haciendo el camino inverso. Hace apenas un mes anunció la apertura de locales más pequeños en los barrios. Son superficies de unos 300 metros cuadrados que apuntan a sumar, además de a los comerciantes que suelen comprar allí, a los consumidores finales, que hasta ahora se surtían en el almacén o en el autoservicio chino. También la cadena mayorista Vital estaría pensando encarar la misma estrategia durante este año.
Con menos inflación y más gasto social, los hogares más pobres consumieron un 3% más en 2017
A su vez, los comercios asiáticos, que en 2017 recuperaron apenas 5 puntos del volumen de ventas que, en 2016, había caído un 12%, también están poniendo la brújula en nuevos centros de distribución que oficien de mayoristas. «Ya nos pusimos de acuerdo en diciembre y el primer centro se abrirá en Malvinas Argentinas», comentó Yolanda Durán, titular de CEDEAPSA, la cámara que agrupa a estos comercios. El sector aspira así a reducir las comisiones que pagan a los mayoristas al tratar directamente con la industria para obtener mejores precios. Según Durán, la movida podría abaratar la mercadería entre un 25 y un 28% respecto de los precios que tienen las grandes cadenas.
Desde Walmart, Juan Pablo Quiroga explicó que las estrategias para el 2018 se fundamentan en tres puntos: el foco en los precios, la innovación en los puntos de venta y el comercio electrónico.
Un objetivo es mantener la política de «precios bajos todos los días», fortaleciendo la marca propia y también bajando la participación de ciertas promociones puntuales (como el 2×1) para que la gente no se limite a ir al súper en un determinado día de la semana.
El consumo masivo cayó 1% en 2017 pero en los sectores de menores ingresos creció 3%
La innovación tiene que ver con la incorporación de locales o nuevos negocios dentro de las sucursales, para achicar los costos de operación. Así, habrá más «inquilinos» en las grandes superficies, como lavanderías, kioskos, locales de Pago Fácil, y otros. «El hipermercado tradicional de 13 mil m2 viene perdiendo participación en todo el mundo», dice Quiroga. Por eso, la cadena norteamericana busca reducir «el piso de venta» a no más de 6.000 o 7.000 m2 para reducir el costo logístico.
En cuanto al comercio electrónico, si bien hasta ahora es baja la cantidad de consumidores que encarga su pedido en la web, hay otra modalidad que viene en aumento: ayudar al cliente a retirar el pedido, rápido, en el supermercado. Walmart, lo llama servicio de «pick up» y está disponible en 21 de sus 106 sucursales. La modalidad, representa el 1,8% de las ventas totales de la firma.
El gasto mensual promedio en el súper: $5162
También los supermercados de Cencosud, Jumbo, Disco y Vea, están introduciendo el servicio “drive thru” o “al auto” en algunos locales de CABA y GBA, que «permite a los clientes realizar sus compras en la web o telefónicamente y retirarlas, de manera gratuita, sin bajarse del auto y en el horario que les quede más cómodo», explicaron en la cadena chilena.
Quienes hoy manejan el negocio del retail no pierden estos detalles porque hoy «no sólo se trata de abrir sucursales para crecer sino que gran parte de la inversión vaya a la reconversión», resume Quiroga. «El modelo del híper de los ’90 ya no funciona como antes. Hoy no basta con que el súper este disponible, hay que adaptarse a las distintas modalidades del cliente», asegura.
Fuente: Clarín